Nuestras ciudades son cada vez más inteligentes

Ya lo sabemos, y ahora lo vivimos. Los retos sociales, como la crisis climática o las diversas crisis sanitarias, están provocando trastornos en todas las esferas de la actividad humana.

Las empresas pueden prestar una valiosa ayuda a las ciudades y a las instituciones comerciales para adaptar sus prácticas y operaciones en consecuencia. Los empleados, los inversionistas y los clientes lo exigirán.

Por supuesto, la tecnología mejora cada día, lo que permite responder más eficazmente a los problemas y optimizar los servicios o infraestructuras existentes.

Tecnologías cada vez más avanzadas permiten hoy simplificar toda una serie de operaciones: la gestión del uso de la energía o la movilidad, la vigilancia del medio ambiente o las operaciones relacionadas con la seguridad privada o pública. Estas tecnologías son ahora inalámbricas y, por lo tanto, permiten controlar a distancia infraestructuras y servicios enteros, todo ello desde la comodidad de una plataforma sencilla, segura y en línea disponible las 24 horas del día.

Las ventajas para la sociedad son importantes:

• Reducir el consumo de energía a gran escala mediante ajustes automáticos de la intensidad del alumbrado comercial y público
• Automatizar el inicio de operaciones como la limpieza de la nieve
• Ayudar a los servicios de emergencia mediante la activación o el parpadeo de las luces cerca de las llamadas al 911
• Simplificar el tiempo de búsqueda de estacionamiento disponible para las zonas urbanas
• Intervenir eficazmente en caso de inundación y evacuar a tiempo a la población
• Ayudar a la toma de decisiones y a los socorristas reconociendo sonidos alarmantes como disparos, accidentes de tráfico o explosiones
• Informar a las autoridades competentes, como las de salud pública, sobre la calidad del aire, las nubes de calor o el nivel de ruido y hacer cumplir las normas vigentes
• Reconocer la presencia de gas en el aire para identificar las zonas de evacuación
• La lista es larga

Las tecnologías desarrolladas por los fabricantes expertos en dispositivos conectados contribuyen de forma concreta al bienestar de toda la sociedad.

Con inversiones tecnológicas sólidas, hoy es posible mejorar drásticamente la vida cotidiana de todos, en todo el mundo.

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